Uno de los problemas más comunes en la cocina es que la comida se nos queme y se nos pegue en el fondo de la olla, en la sartén o en la bandeja del horno. Y el problema no es sólo que echemos a perder el plato que hemos cocinado, sino que además hay que limpiar los restos que han quedado pegados en el fondo del recipiente.

La forma más recurrida para limpiar los restos de esa comida quemada es frotando con estropajo, algo que además de ser muy cansado, puede estropear el material de la olla, sartén o bandeja.

Para evitar esto, a continuación explicamos algunos métodos muy sencillos para limpiar y eliminar fácilmente la comida pegada y quemada:

  1. Llenar la olla, sartén o bandeja con agua y un poco de levadura (2 cucharadas pequeñas de levadura por cada vaso de agua) y poner durante 2 ó 3 minutos al fuego. Pasado ese tiempo, ya se podrá limpiar con una esponja o estropajo de forma suave y sin necesidad de frotar. Es un método muy rápido y eficaz.
  2. Llenar la olla, sartén o bandeja con agua y bicarbonato sódico (2 cucharadas pequeñas de levadura por cada vaso de agua) y poner durante 2 ó 3 minutos al fuego. Pasado ese tiempo, ya se podrá limpiar con una esponja o estropajo de forma suave y sin frotar. Hay que tener cuidado porque al tratarse de bicarbonato, hará espuma y puede que se desborde del recipiente.
  3. Otro método es como los dos anteriores pero, en lugar de echar levadura o bicarbonato sódico al agua, echamos vinagre blanco o limón. Podremos limpiar sin frotar pasados unos 2 ó 3 minutos al fuego.
  4. Un método que mezcla dos de los anteriores es llenar la olla, sartén o bandeja con agua, vinagre blanco y levadura (50 gramos de vinagre blanco y 5 gramos de levadura por cada 100 gramos de agua). Este método nos permite poner el recipiente durante 5 minutos al fuego. Pasado ese tiempo, ya podremos limpiar con una esponja o estropajo sin necesidad de frotar.
  5. Dentro de la olla, sartén o bandeja mezclar agua con lejía y poner durante 3 minutos al fuego, con la precaución de tener la cocina ventilada y protegernos la boca y la nariz ya que la lejía desprende vapores tóxicos. Sólo podemos mezclar la lejía con agua.
  6. Llenar la olla, sartén o bandeja con agua y detergente y poner durante 2 ó 3 minutos al fuego. También es necesario tener la cocina ventilada y protegernos del vapor.
  7. Para casos más leves, es decir, cuando la comida se ha quedado un poco pegada pero no se ha llegado a quemar, la olla, sartén o bandeja quedará limpia con un simple desglasado: echando un poquito de coñac, vino tinto o vino blanco en el recipiente y ponerlo a cocer durante unos minutos al fuego. Con este método la comida de despegara con facilidad y ya podremos limpiar normalmente el recipiente.