¿Qué entendemos por una alimentación equilibrada? ¿Son necesarios los complementos alimenticios cuando se come correctamente? ¿Es más caro comer sano? Seguro que si estás pensando en llevar una dieta más sana y en cambiar tus hábitos alimenticios ya sea porque quieres cuidarte ya sea porque te lo impone una enfermedad, te has preguntado todas estas cosas como mínimo. Por eso, vamos a intentar dar respuesta a estas dudas y ayudarte a tomar una decisión correcta.

 

1. Conocer los nutrientes de los alimentos y nuestras necesidades

Es muy importante conocer bien los grupos de alimentos y los aportes nutricionales de cada uno, de esta forma podremos obtener los nutrientes y vitaminas que necesitamos al saber los alimentos que nos lo proporciona. Básicamente, se entiende por una alimentación equilibrada aquella que proporciona a la persona la cantidad óptima de nutrientes y de calorías, sin caer ni en carencias ni en excesos. Para esto, lo ideal es comer lo más natural posible y no renunciar a ningún grupo de alimentos, salvo que motivos de salud así lo exijan.

La alimentación equilibrada se tiene que adaptar a lo que necesita cada persona, es decir, es personalizada. No son iguales las necesidades de un adolescente que las de un adulto y tampoco las de un deportista que las de una persona sedentaria. Lo que para unos puede ser un menú desequilibrado porque tenga carencias de azúcares o de hidratos, para un diabético puede ser la diferencia entre mantenerse con pastillas o acabar siendo insulinodependiente.

 

2. Añadir complementos alimenticios en una dieta equilibrada

Se supone que siguiendo una dieta sana y equilibrada ya obtenemos todo lo que necesitamos. Pero no es así necesariamente. Y podemos verlo en dos ejemplos muy sencillos:

-Una persona con problemas en el intestino. Puede ser debido a la toma de un antibiótico o quizás a que tiene un problema más grave como ser celíaco. Estas personas pueden tener dañada la flora intestinal y da igual que coman todo lo que necesitan, porque no lo asimilarán correctamente. Un complemento para la flora intestinal les ayudará a conseguir mejorar su asimilación de nutrientes.

-Un deportista. Puede tener requerimientos muy altos de un mineral o de una vitamina, tal vez de proteínas, siendo difícil que una alimentación equilibrada le de todo eso. En lugar de desequilibrar su alimentación para obtener ese plus, lo consigue con un complemento alimenticio adecuado.

 

3. No ahorrar en alimentación, lo barato a la larga sale caro

Desde luego, es más caro incluir en el menú pescado o carne que comer pasta o arroz casi exclusivamente. También es más caro comprar un filete magro que una hamburguesa que se realiza con carne de peor calidad. Por tanto, sí, comer sano es más caro que no hacerlo, al menos a corto plazo.

Está demostrado que los barrios con mayor poder adquisitivo y se pueden permitir una mejor alimentación tienen una mejor salud, con menos enfermedades y mayor esperanza de vida ¿Vas a seguir ahorrando en la lista de la compra por no comprar calidad?

 

4. Hacer un planning semanal

Lo ideal para tener una dieta equilibrada y que nos aporte vitaminas, proteinas, hidratos, etc,.. es hacer un planning semanal en el cual incluiremos alimentos de todos los grupos y categorías: pescados, carnes, frutas, verduras, pastas, arroces, etc..

De esta forma no caeremos en el error de tomar un exceso de hidratos o perder ciertas vitaminas en nuestra dieta. La planificación es la mejor forma de hacer una lista de la compra, no solo para la salud, sino también para el bolsillo.

No caigas en el error de caer tentado por la bollería y los dulces e intenta ceñirte a la lista de la compra.

 

Son cuatro consejos muy básicos y fácil de aplicar, y que sin duda funcionan. Ahora que lo sabes ¿vas a seguir nuestros consejos? ¿Quieres aportar algún consejo más? ¡Usa el siguiente formulario de comentarios y los publicaremos!