Llega el día de cima, por delante nuestra más de 10 horas de actividad y 1.000 metros de ascenso. Hace frío, nuestra mochila pesará y posiblemente encontremos nieve en el camino. Está claro que el ascenso al Mulhacén será una experiencia inolvidable, cuya imagen y recuerdo nunca podremos borrar ni de nuestra mente ni de nuestras retina.

Pero la pregunta que se hace todo el mundo es, ¿cómo debo prepararme para este reto? Nuestros amigos de Guias Sierra Nevada nos dan algunos consejos para afrontar con garantías la subida al Mulhacén.

 

¿Seré capaz de conseguir el reto? ¿Cómo me preparo fisicamente?

Ya desde niños, cuando empezamos a hacer montaña, nuestros mayores nos insisten en que la mejor manera de entrenar para ir a la montaña es yendo a la montaña. Y es bien cierto que es un deporte “difícil” de entrenar si no es en ese medio.
En caso de no tener la montaña cerca de casa o si no disponemos de tiempo entre semana, siempre podemos simular las condiciones ya sea en un gimnasio o al aire libre. Yo siempre me inclino por el aire libre, una buena marcha por un parque o un pequeño parque periurbano con una mochila con cierto peso, nos puede servir. No olvidemos que más del 50% de nuestra preparación irá de la mano de una buena alimentación.

¿Qué época es la más adecuada?

Aquí en el Sur, el macizo de Sierra Nevada presenta unas condiciones climáticas muy especiales al resto de montañas, y el contraste entre el verano y el invierno es muy grande.

En verano, si caminamos por la vertiente norte podemos encontrar algo de nieve, sobre todo a principio de temporada, pero en cuanto avanza el verano o nos desplazamos a la vertiente sur, suele ser difícil localizarla, encontrando los caminos limpios. Sin embargo, hay que tener en cuenta que el frío por la noche suele ser intenso, y las tormentas habituales.

En invierno, es habitual encontrar nieve dura y hielo por el gran contraste térmico entre el día y la noche, sin olvidar de que el Mediterráneo está muy cerca y la humedad es muy alta.

 

¿El Mulhacén es fácil, sube cualquiera. ¿Es cierto?

Para nada, es una montaña con mucha altitud, roza los 3.500 metros sobre el nivel del mar, esto significa que es alta montaña y en este tipo de terreno hay que cumplir todas las normas. Bien es cierto, que es muy accesible, y esto suele llevar a la errónea idea de que es fácil, pudiendo se las consecuencias fatales.

Todos los años ocurren accidentes, y en todas las temporadas, en invierno, las caídas y los aludes son frecuentes, pero en verano las tormentas y las nieblas suelen causar problemas. Lo ideal es o ir muy preparado, o contratar un Guía que nos garantice la seguridad, y por supuesto el disfrute de la ascensión al Mulhacén.

 

¿Qué necesito llevar?

Hay un equipo mínimo que debemos llevar en la mochila de acuerdo a la época en que vayamos a subir al Mulhacén y las condiciones de la montaña o el clima. Es importante que vuestro Guía profesional lo revise todo, primero desde casa, y luego antes de partir a la cima. Hay que ser precavido y cumplir con todo, nunca se sabe cuándo vamos a tener que pasar una noche inesperada a la intemperie en la montaña si algo sale mal.

¿Es recomendable contratar un Guía?

Por supuesto, el guía, no solo conoce la montaña y gestionará el riesgo al máximo, si no que enriquecerá enormemente la actividad. Ya desde casa, el guía os aconsejará cuál es el equipo más recomendable para llevar, los horarios y por supuesto la ruta que mejor se adaptará a vuestra condición física y técnica.

Al emprender la marcha, sabrá perfectamente adaptar el ritmo a los horarios y vuestra condición, y sobre todo lo más importante, os ayudará a conseguir la cima pero con total seguridad, os ayudará a que cumpláis vuestros sueños y descubráis hasta donde sois capaces de llegar.